Miles de vecinos protestan por el nuevo servicio que ofrecerá el tanatorio de la M-40: «Ya no somos ni ciudadanos de segunda, somos invisibles». Manifestantes en la última protesta contra el crematorio. «La historia de los barrios de Madrid se ha construido a base de decepciones y de lucha… A base de no tirar la toalla aunque la guerra pareciese perdida». Los vecinos del sur de Madrid, más concretamente de los distritos de Villaverde y Usera, se mueven entre el hartazgo, el enfado y la pena. Tras lograr parar hasta en tres ocasiones (2002, 2015 y 2021) la construcción de un crematorio dentro del tanatorio de la M-40, este pasado 20 de agosto.
La indignación crece entre los residentes de Villaverde y Usera ante la posibilidad de que se concrete la instalación del crematorio en el tanatorio de la M-40. Esta decisión ha desencadenado una ola de protestas que ha reunido a miles de vecinos en las calles, clamando por sus derechos y exigiendo que se respete su calidad de vida.
Historia de lucha y resistencia
Estos distritos del sur de Madrid han sido históricamente zonas de lucha y resistencia, donde sus habitantes han sabido unirse para defender sus intereses y mantener la esencia de sus barrios. La construcción de un crematorio en el tanatorio de la M-40 representa una afrenta a esta historia de lucha, pues los vecinos consideran que se trata de un ataque directo a su calidad de vida y a su derecho a vivir en un entorno saludable.
Impacto en la salud y el medio ambiente
Uno de los principales argumentos de los manifestantes en contra del crematorio es su impacto en la salud y el medio ambiente. Estudios científicos han demostrado que la incineración de cadáveres emite sustancias tóxicas y contaminantes que pueden ser nocivas para la salud de las personas que viven en las cercanías. Además, la presencia de un crematorio en la zona podría afectar la calidad del aire y el entorno natural de Villaverde y Usera, poniendo en riesgo la salud de toda la comunidad.
Reclamando su derecho a decidir
Los vecinos de Villaverde y Usera se sienten desamparados ante la decisión de instalar un crematorio en el tanatorio de la M-40, sin que se haya tenido en cuenta su opinión ni se hayan realizado consultas públicas al respecto. Muchos consideran que se está vulnerando su derecho a decidir sobre cuestiones que afectan directamente a su calidad de vida y a la salud de sus familias. Por ello, han decidido alzar la voz y manifestarse enérgicamente para exigir que se respeten sus derechos y se escuche su voz en este importante asunto.
En resumen, la instalación de un crematorio en el tanatorio de la M-40 ha desatado una ola de protestas en los distritos de Villaverde y Usera, donde los vecinos se han unido para defender sus derechos y su calidad de vida. La lucha continúa y los residentes de estas zonas prometen no rendirse hasta lograr que se respete su opinión y se detenga la construcción de esta instalación que consideran perjudicial para su salud y su entorno.