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El debate sobre la jornada escolar más favorable para el alumnado de los centros escolares vuelve como cada año al inicio del curso. La vuelta al cole de este año, además, ha estado marcada por el anuncio de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, de que «todos los nuevos colegios públicos de Educación Infantil y Primaria que se construyan en la región también impartirán 1º y 2º de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y tendrán jornada partida de manera obligatoria».

La mayoría de estudios señalan que la jornada partida, con las clases divididas entre la mañana y la tarde, favorece un mejor rendimiento escolar frente a la jornada continua, cuando se concentran todas las horas lectivas en la mañana. Diversas investigaciones e informes de organizaciones como la OCDE o ESADE también se inclinan hacia la partida como forma de combatir el abandono escolar y las desigualdades.

Pero, ¿qué piensan las familias y los profesores al respecto? A continuación, se presentan diferentes opiniones recopiladas en las calles de Madrid.

### Opiniones de las familias

En una fresca mañana de martes en Madrid, se puede observar el habitual trajín de las mochilas escolares frente a los colegios de la capital. Anaïs, una madre de 40 años, prefiere la jornada partida para conciliar con su trabajo a jornada completa. Según ella, los niños de esa edad no son tan productivos con tantas horas de colegio. Esta opinión es compartida por la mayoría de los progenitores entrevistados, como Alberto, de 38 años, quien también está a favor de la partida por cuestiones de conciliación familiar.

Por otro lado, Garazi, mamá de una niña que ha empezado Primaria este curso, prefiere la jornada continua, ya que considera que en un futuro laboral será lo más habitual y prefiere que su hija se vaya acostumbrando desde pequeña. A pesar de ello, la mayoría de padres coinciden en que la jornada partida les permite organizarse de manera más eficiente.

### Argumentos del profesorado

Desde la perspectiva de los profesores, las opiniones también están divididas. Inés, una maestra de 56 años, asegura que la mejor opción es la jornada continua, ya que permite que los niños mantengan un ritmo de aprendizaje constante y no se vean afectados por el cansancio de la tarde. Sin embargo, Ana, una educadora, defiende firmemente la jornada partida, argumentando que los niños rinden mucho más y descansan adecuadamente entre las clases.

Andrés Cebrián, presidente del sindicato ANPE Madrid, rechaza la iniciativa del gobierno madrileño de imponer la jornada partida en nuevos colegios públicos, ya que considera que los centros deben poder elegir libremente el modelo de jornada escolar que prefieran dentro de su autonomía.

En resumen, el debate sobre la jornada escolar sigue vigente, con opiniones encontradas entre familias, profesores y expertos en educación. Es fundamental considerar el bienestar y el rendimiento académico de los estudiantes al tomar decisiones sobre el horario escolar. La conciliación familiar, el descanso de los niños y la autonomía de los centros educativos son aspectos clave a tener en cuenta en esta discusión.