Calificación de Colósimo en el Barrio de Salamanca
Gastronomía
Dos hermanos chiclaneros llevan años concitando interés. Su fórmula: cocina muy clara, enraizada y fidelidad a la propuesta
Los aires del sur siempre han causado estado en la capital. Hay un auténtico maridaje de influencias de Madrid hacia el Bajo Guadalquivir y a la inversa. Parte de la piel de esta ciudad tan camaleónica como Los Madriles es andaluza, y en gastronomía hay tantos lugares con ese marchamo que bien podría hacerse una ruta de lugares con esa influencia. Dos hermanos chiclaneros, Ricardo y Mané Romero, llevan unos años en la parte genuina del barrio de Salamanca, esa que huele a barrio de verdad, concitando el interés de esa burguesía de poso que por allí vive.
El secreto de Colósimo es la vieja fórmula de la cocina muy clara, enraizada y de fidelidad a la propuesta. Todo con esa gracia que tienen los nacidos en la histórica zona de Tartessos, y con esa gracia de la que hablaba el Beni de Cádiz. Ese duende que poseía el inclasificable cantaor, y que le concede encanto a lo que se toca, y en este caso se cocina.
Subheadings: La esencia andaluza en el corazón de Madrid – Una propuesta gastronómica auténtica – La experiencia en Colósimo
La esencia andaluza en el corazón de Madrid
La presencia de la gastronomía andaluza en el corazón de Madrid es una combinación que atrae a los paladares más exigentes. La fusión de sabores tradicionales con un toque contemporáneo es lo que hace que Colósimo sea un lugar único en el barrio de Salamanca. Los hermanos Romero han sabido captar la esencia de la cocina andaluza y trasladarla a la capital, conquistando así a una clientela selecta que busca autenticidad y calidad en cada plato.
Una propuesta gastronómica auténtica
En Colósimo, cada plato es una obra de arte culinaria que combina sabores, texturas y presentaciones de forma magistral. Desde la clásica tortilla de patatas con mucha cebolla, hasta la ensaladilla rusa con camarón y piparra, todo en este bistró desprende un aire de tradición y buen hacer. La croqueta de puchero y la de bacalao son ejemplos de la maestría con la que se elaboran los platos en este establecimiento, donde la calidad y la creatividad se fusionan para deleitar a los comensales más exigentes.
La experiencia en Colósimo
Cada visita a Colósimo es una experiencia única que combina gastronomía, ambiente y servicio de primera. La cuidada selección de vinos andaluces, tanto generosos como secos, añade un toque especial a cada comida, complementando a la perfección los sabores de los platos. La sala, armonizada con la misma simpatía que se percibe en la cocina, crea un ambiente acogedor y distinguido que invita a disfrutar de una velada inolvidable.
En resumen, Colósimo ha logrado la difícil tarea de fusionar la tradición culinaria andaluza con la elegancia y sofisticación del barrio de Salamanca en Madrid. Cada plato es una deliciosa sorpresa que transporta a los comensales a los sabores de siempre con un toque de modernidad. Sin duda, una visita a este encantador bistró es garantía de felicidad gastronómica.
BODEGA 8
COCINA 8
SALA 8
FELICIDAD 9