El presidente de Senegal, Bassirou Diomaye Faye, anunció la creación de una línea telefónica gratuita para que los ciudadanos informen a las autoridades sobre posibles salidas de cayucos hacia Canarias y denuncien a sus organizadores. Este anuncio se hizo luego de un naufragio en Mbour que dejó al menos 40 muertos y 40 desaparecidos. La búsqueda de más víctimas continúa. El organizador del viaje, un pescador de 52 años, es hermano del alcalde y subió a bordo a varios familiares.
A pesar de que este no es el primer naufragio de migrantes en Senegal, el presidente Faye ha prometido una «persecución implacable» contra los responsables de estos viajes. En el último mes, las fuerzas de seguridad lograron evitar la salida de 690 jóvenes hacia Canarias. Sin embargo, Faye reconoció la importancia de la colaboración ciudadana y anunció la implementación de un número verde para recibir informes sobre estas salidas.
El llamado a la población es claro: no deben callar si saben de posibles salidas de cayucos. La cooperación es vital para prevenir más tragedias. El presidente también instó a las familias a no presionar a los jóvenes a emigrar irregularmente y prometió trabajar en políticas que generen empleo en Senegal.
En cuanto al naufragio en Mbour, se han revelado más detalles sobre el organizador del viaje. Cheikh Sall, pescador de 52 años, se entregó a las autoridades y declaró que cobró entre 300 y 600 euros a los jóvenes que subieron al cayuco. Además, se ha detenido a la persona que vendió la gasolina para la travesía.
La tragedia en Mbour ha conmocionado a Senegal y ha llevado al presidente a tomar medidas drásticas contra los traficantes de personas. La colaboración ciudadana se convierte en una herramienta clave para prevenir futuros naufragios y proteger a los jóvenes que buscan un futuro mejor en Canarias. La esperanza de un cambio en Senegal radica en la unión de todos los sectores para construir un país próspero y seguro para sus habitantes.