Hace ocho años, Carlos Suárez se enfrentó a la dificultad de vender las obras de arte de su padre. Después de intentar venderlas en plataformas internacionales sin éxito, decidió probar suerte entre sus compañeros de trabajo. Creó un perfil en Facebook como un artista anónimo y logró vender tres obras. Este éxito lo llevó a reflexionar sobre el problema de la valoración del arte y la falta de conocimiento en el mercado.
Tras diez años de experiencia en banca de inversión, Suárez decidió aplicar sus conocimientos al sector del arte. Después de reunirse con asociaciones de artistas, galerías y museos, comprendió cómo funcionaba el mercado del arte y la importancia de la oferta y la demanda en la fijación de precios. Así nació Saisho, el primer y único mercado cotizado de arte del mundo.
Saisho, cuyo nombre significa «primero» en japonés, se enfoca en democratizar el arte. Con un equipo de expertos, Saisho selecciona, valora y organiza obras de arte bajo un sistema accesible para todos los consumidores. Al llegar a Saisho, los clientes reciben asesoramiento personalizado y una formación básica sobre el mercado del arte. A través de videollamadas, se presentan obras de artistas seleccionados y se guía a los clientes en su proceso de compra.
Actualmente, Saisho trabaja con casi cien artistas, pero no todos califican para formar parte de su mercado. Se evalúan cincuenta parámetros, como el statement, referencias artísticas, contexto, composición y complejidad, entre otros. Con un enfoque en la revalorización anual del 16%, Saisho se compromete a llevar las obras de sus artistas al mercado de manera efectiva.
Además, Saisho garantiza que el precio de transacción se mantenga cercano al valor cotizado, protegiendo así el valor de las obras y beneficiando tanto a los artistas como a los compradores. Su visión a corto plazo es hacer que todas las bellas artes sean accesibles para todo tipo de consumidores, convirtiéndose en la primera empresa de bellas artes del mundo.
En un mundo donde la valoración del arte puede resultar confusa o inaccesible, Saisho emerge como una alternativa innovadora que busca simplificar el proceso de compra e inversión en arte. Con un enfoque transparente y experto, Saisho se posiciona como un aliado tanto para artistas emergentes como para compradores interesados en adentrarse en el mundo del arte.