La nueva ley de universidades de la Comunidad de Madrid está generando controversia y debate entre los diferentes actores del ámbito educativo. Esta normativa, conocida como Lesuc, pretende eliminar los «excesos ideológicos» de la Ley Orgánica de Universidades (LOSU) y promover la competitividad entre las universidades de la región.
La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha destacado la importancia de regular los perfiles académicos dentro de las instituciones universitarias para garantizar la excelencia y el prestigio. En este sentido, la Lesuc establecerá que los candidatos a rector deben estar acreditados para ser catedráticos, una exigencia que había sido eliminada en la LOSU. Con esta medida, se busca recuperar la calidad en la gestión universitaria y evitar situaciones como la ocurrida con la mujer de Pedro Sánchez, que ejerció como codirectora de una cátedra sin la titulación correspondiente.
La nueva normativa también tiene como objetivo combatir la endogamia universitaria y evitar la intromisión de perfiles no cualificados en la toma de decisiones. Se busca reconocer las acreditaciones académicas y fomentar la atracción de los mejores docentes e investigadores, independientemente de su procedencia. De esta manera, se pretende elevar el nivel de excelencia en el ámbito universitario y fortalecer la reputación de las instituciones educativas madrileñas.
Financiación Plurianual y Competitiva
Uno de los aspectos más relevantes de la Lesuc es la regulación de un modelo de financiación plurianual para las universidades de la Comunidad de Madrid. Este sistema contempla una financiación básica para el funcionamiento regular de las instituciones, así como recursos adicionales por necesidades singulares y la posibilidad de acceder a fondos competitivos por la consecución de objetivos específicos.
La presidenta Ayuso ha destacado que esta nueva forma de financiación busca incentivar la competitividad entre las universidades y premiar la excelencia en la innovación docente y tecnológica. Se espera que este enfoque contribuya a mejorar la calidad del sistema universitario y a fomentar la realización de proyectos que impacten positivamente en la formación y la investigación.
En este sentido, el rector de la Universidad Carlos III de Madrid y presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Públicas Madrileñas (CRUMA), Ángel Arias, ha respaldado la propuesta de financiación por objetivos y rendición de cuentas. Sin embargo, ha subrayado la necesidad de una financiación adecuada y estable para garantizar el desarrollo de las universidades públicas de la región.
Colaboración con la Formación Profesional y la Empresa
La Lesuc también busca fortalecer la conexión entre la universidad y la Formación Profesional, así como promover la colaboración con el sector empresarial. Se pretende impulsar la formación dual y la participación activa de las empresas en el proceso educativo, en línea con las demandas del mercado laboral y las necesidades de la sociedad.
Además, la nueva normativa incluirá una regulación específica para las escuelas de negocios, con el objetivo de garantizar su calidad y su contribución al desarrollo económico de la región. Se prevé una mayor cooperación entre la universidad y las empresas para fomentar la innovación y el emprendimiento, así como el uso del español como lengua de educación superior.
Preocupación de los Rectores por la Financiación
A pesar de las medidas propuestas en la Lesuc, los rectores de las universidades públicas madrileñas han expresado su preocupación por la falta de financiación inmediata para hacer frente a las necesidades actuales. Si bien apoyan la fórmula de financiación por objetivos, consideran que es fundamental contar con recursos suficientes para mantener el funcionamiento de las instituciones y garantizar su calidad educativa.
Los rectores han destacado la importancia de una financiación justa y estable para asegurar el desarrollo de las universidades públicas de la región. A pesar de las promesas de la Lesuc, han señalado la incertidumbre sobre el presupuesto para el próximo año y la falta de compromiso claro por parte de las autoridades. En este sentido, han instado a la presidenta Ayuso a tomar medidas concretas para asegurar la viabilidad financiera de las universidades madrileñas.
En conclusión, la nueva Ley de Enseñanzas Superiores, Universidades y Ciencia de la Comunidad de Madrid plantea importantes cambios en el sistema educativo superior de la región. Con un enfoque en la excelencia académica, la competitividad y la colaboración con el sector empresarial, se espera que esta normativa contribuya a fortalecer la calidad y el prestigio de las universidades madrileñas en el ámbito nacional e internacional.