A partir del 23 de diciembre, la huelga tendrá lugar en Madrid afectando a los autobuses de la Empresa Municipal de Transporte (EMT) y a los interurbanos. La Comunidad de Madrid ha establecido unos servicios mínimos del 75% para los autobuses de la EMT y del 80% para los interurbanos durante la huelga convocada en el sector de transportes de viajeros por carretera. La razón de la huelga es para exigir la jubilación por peligrosidad.
La huelga está programada para el próximo lunes 28 de noviembre, así como para los días 11, 28 y 29 de noviembre, y el 5 y 9 de diciembre. A partir del 23 de diciembre, la huelga se volverá indefinida. Durante el lunes, los conductores de autobuses urbanos, interurbanos y grúas se reunirán para una concentración a las 12:30 en la Delegación del Gobierno en Madrid. La convocatoria es a nivel nacional y se busca el adelanto de la edad de jubilación y el reconocimiento legal de la labor del conductor como «penosa».
La Consejería de Vivienda, Transportes e Infraestructuras ha establecido unos servicios mínimos del 75% para los autobuses de la EMT en hora punta (de 6:00 a 9:30 horas) y del 50% en horas valle. Para los autobuses interurbanos, los servicios mínimos serán del 80% en hora punta y del 45% en horas valle. En cuanto a las líneas nocturnas, se garantiza una cobertura del 45% del servicio programado. Durante los días festivos, los servicios mínimos serán del 50% en EMT y del 45% en el resto de los autobuses urbanos e interurbanos de la región.
En lo que respecta al transporte escolar, se han establecido servicios mínimos del 60% debido a que se considera un servicio esencial que afecta a menores y garantiza su derecho a la educación. Para el transporte de personas con discapacidad y movilidad reducida, los servicios mínimos serán del 90%.
La huelga ha sido convocada por Comisiones Obreras (FSC-CCOO), la Federación Estatal de Servicios, Movilidad y Consumo del Sindicato Unión General de Trabajadores (FESCM-UGT) y el Sindicato Libre de Transportes (SLT). La demanda principal es la jubilación por peligrosidad y el reconocimiento legal de la labor de los conductores como penosa. Los servicios mínimos han sido establecidos para garantizar cierta movilidad durante la huelga y asegurar que servicios esenciales, como el transporte escolar y para personas con discapacidad, no se vean gravemente afectados.