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Un adolescente de 15 años ha sufrido heridas graves por electrocución después de tocar una torre de alta tensión en el municipio de Galapagar, según informó un portavoz de Emergencias Comunidad de Madrid 112 a Europa Press.

El incidente tuvo lugar poco antes de las 11:45 horas de este lunes cerca del parque de El Toril, en las inmediaciones del casco urbano. Los servicios sanitarios del Summa llegaron al lugar y lograron estabilizar al joven herido, quien presentaba quemaduras de tercer y segundo grado, principalmente en la cara y las manos. Fue trasladado en estado crítico a la Unidad de Grandes Quemados del Hospital de La Paz.

Los bomberos y las Brigadas Forestales de la Comunidad de Madrid extinguieron un pequeño incendio de pasto en la zona como consecuencia de la descarga eléctrica. La Guardia Civil se encuentra investigando las circunstancias que llevaron al adolescente a estar en ese lugar y lo ocurrido exactamente.

Consecuencias de la electrocución

Las quemaduras sufridas por el joven son de gravedad y requieren atención médica especializada. Las lesiones provocadas por una electrocución pueden ser devastadoras, afectando no solo la piel, sino también los tejidos internos y el sistema nervioso. Es fundamental brindar al paciente un tratamiento integral que aborde no solo las lesiones superficiales, sino también las posibles complicaciones internas.

Prevención de accidentes eléctricos

Es fundamental recordar la importancia de la prevención en casos de accidentes eléctricos, especialmente en áreas donde hay infraestructuras de alta tensión. Es vital educar a la población, y sobre todo a los jóvenes, sobre los peligros asociados con la electricidad y cómo actuar de manera segura en presencia de cables y torres de alta tensión. La prevención y la concienciación son clave para evitar tragedias como la ocurrida en Galapagar.

Investigación en curso

La Guardia Civil está llevando a cabo una exhaustiva investigación para determinar las circunstancias que rodearon el incidente y por qué el adolescente se encontraba en las proximidades de la torre de alta tensión. Es fundamental esclarecer los hechos para prevenir futuros accidentes similares y para determinar si hubo negligencia por parte de terceros que pudiera haber contribuido a la tragedia.

En conclusión, este lamentable incidente en Galapagar nos recuerda la importancia de la seguridad eléctrica y la necesidad de educar a la población sobre los peligros asociados con la electricidad. Esperamos que el joven herido se recupere pronto y que se tomen medidas preventivas para evitar situaciones similares en el futuro.