La presentadora no tuvo piedad con los políticos que participaron en El rival más débil. Luján Argüelles lanzó varios comentarios punzantes a lo largo del programa, dejando claro que en ese espacio se venía a responder y no a dar discursos políticos. Incluso mencionó a políticos ausentes, como Almeida, en medio de las pullas.
Los concursantes, por su parte, también se sumaron a la dinámica y no dudaron en lanzarse críticas unos a otros. Toni Cantó, ex de Ciudadanos, no dudó en hacer un comentario irónico dirigido a Pilar Rahola, expulsada del programa. Finalmente, Susana Díaz se alzó como la ganadora, donando el premio a una ONG que ayuda a niños con síndrome de Angelman.
A pesar de que la última ronda fue un poco desastrosa y solo hubo una respuesta correcta por parte de la ex presidenta de Andalucía, lograron acumular 7.700 euros a lo largo del programa. Susana Díaz aprovechó la oportunidad para destacar la importancia de la investigación en enfermedades raras y la necesidad de apoyar estas causas con donaciones.
En resumen, El rival más débil con políticos fue una experiencia llena de zascas, críticas y, al final, solidaridad. Los participantes demostraron que, más allá de las diferencias políticas, también pueden unirse por una buena causa y ayudar a quienes más lo necesitan.