El mundo de la gastronomía española es tan vasto y delicioso que nos lleva a descubrir rincones maravillosos en Madrid. Comenzamos nuestro recorrido en la Antigua Pastelería del Pozo, un lugar lleno de historia y tradición que ha sabido perdurar a lo largo de los años. Aquí, el hojaldre es el rey, ya sea en banderas, empanadas o en la famosa bayonesa, hecha con crema o cabello de ángel. La manteca de cerdo es el ingrediente secreto que le da ese sabor único y delicioso.
En la taberna de Antonio Sánchez, fundada en 1783, se puede disfrutar de un menú del día por un precio muy accesible. Las croquetas de bacalao son la especialidad de la casa y no hay que dejar de probarlas. En Casa Labra, las croquetas también son protagonistas, pero en esta ocasión de bacalao. Otra delicia es el pescado con setas y alcaparras, preparado de diferentes maneras para satisfacer a todos los comensales.
Casa Enriqueta, en Carabanchel, nos invita a probar platos tradicionales como gallinejas, entresijos, zarajos, madejas y mollejas. La tradición sigue viva en Casa Mingo, donde el pollo asado es el plato estrella y sigue siendo tan delicioso como siempre. El cocido, servido de lunes a viernes, es otra opción imperdible por tan solo 21 euros.
El Bierzo de Barbieri es otro lugar que no podemos dejar de visitar. En este restaurante, ubicado en Chueca, se pueden degustar platos como sopa de arroz, acelgas rehogadas y hígado encebollado, todos preparados con maestría y un sabor inigualable. En La Gran Tasca, en el barrio de San Blas-Canillejas, los callos y el cocido son los platos estrella, elaborados con quince ingredientes cuidadosamente seleccionados.
La Tienta es un lugar emblemático con un ambiente taurino único, donde se pueden disfrutar de platos como la oreja y la ensaladilla. Los caramelos de La Violeta son una delicia que no podemos dejar de probar. La Mina, en Chamberí, es conocida por ser una de las mejores marisquerías de Madrid, con un pincho moruno que es toda una delicia desde 1949.
En La Castañal, se puede disfrutar de mariscos frescos a precios razonables. La Andaluza en Arganzuela y El Greco en Argüelles son refugios para aquellos que buscan autenticidad en la mesa. Bora, Bora, Doble y Gilda, y El Nuevo Zaguán también son lugares que merecen una visita. En Aranjuez, El Solete con Solera ilumina El Corral de la Abuela, mientras que en Navacerrada, el Jardín de Felipe ofrece una experiencia culinaria única. En Chinchón, La Balconada y en Cercedilla, La Venta Vieja son lugares que no podemos dejar de visitar para disfrutar de la deliciosa gastronomía española. ¡Buen provecho!